Hace ya días que me planteo que hacer con el blog. Últimamente tengo la impresión de que he entrado en una fase de contenido monótono, que las cosas que explico ya no son interesantes, y que me falta chispa en el contenido. Casi se podría decir que se me ha pegado el estado de crisis que vivimos en los tiempos actuales. Pero a la vez me gustaría seguir escribiendo, porque creo firmemente que un blog te ayuda en muchos aspectos a conseguir algunos objetivos que te hayas marcado, por ejemplo es fundamental para ordenar y organizar tus ideas, te ayuda a ponerte en contacto con otros, a aprender cosas, y a escribir aceptablemente, por ejemplo.

Pero la vedad es que hay blogs que generan tanto tráfico que sus propietarios los llenan de publicidad para sacarse un dinero. Y hay otros que son utilizados para atraer personas a sus propias empresas gracias al número de visitas que les llegan. Incluso hay gente –pocos, pero los hay- que viven de lo que escriben en su blog. ¿Qué hace a estos blogs y blogueros tan famosos, sobre todo si no eran famosos antes de escribir en su blog?

He buscado un poco por internet, y hay muchísima literatura sobre el tema. Consejos de que escribir, como hacerlo, y como promocionarse. Pero sobre todo me han gustado ocho recomendaciones que hace Lewis Howes, y que encontré mediante una entrada en el blog de Guy Kawasaki, que si es un auténtico fenómeno en internet.

La primera recomendación es ser uno mismo. Aunque normalmente la gente que te lee no te conoce de nada, no puedes representar lo que no eres, porque quien te lea se va a dar cuenta y no va a creer lo que digas. Cada uno es como es, y lo mejor es escribir tal como tú eres, sin representar un papel.

La segunda es mantenerse activo en las redes sociales principales. Hablamos de twitter, linkedin y facebook. Promocionar en ellas lo que vas haciendo, las cosas que te preocupan y las que te emocionan. Y unirse a grupos con intereses similares, participando activamente en las conversaciones. Es complicado si tienes un trabajo de tiempo completo, pero hay que intentarlo.

La tercera es dar contenidos realmente buenos. Contenido que haga que la gente hable de ti, que difundan tu mensaje, que te mencionen en sus propias webs. Contenido personal, de tu experiencia, de lo que piensas y lo que sientes, y también externo de calidad.

La cuarta es organizarse bien. Parece una tontería, pero para conseguir mantenerse activo, para escribir cosas de calidad, para promocionar tu trabajo, para contestar a la gente que te escribe, para hacer comentarios en otros blogs, necesitas muchísimo tiempo, y solo lo puedes conseguir si tienes un método para organizarte. En este blog he hablado muchísimo del GTD, pero no es el único sistema. Hemos de gestionar bien el tiempo para que nuestro mensaje llegue al máximo de sitios posibles.

La quinta es ser consistente con tu mensaje. Hoy no puedes estar hablado de una cosa y mañana de otra diferente, u hoy no puedes tener una opinión sobre algo y mañana haberla cambiado del todo. Obviamente todo el mundo puede cambiar, pero lo has de justificar muy bien, sino lo único que consigues es confundir al personal.

La sexta es ser altruista. Quiero decir, has de promocionar y ayudar a otros en tu blog. La generosidad normalmente se devuelve en forma de generosidad, si tú hablas de alguien en tu blog, y lo haces de forma sincera, es posible que esta persona haga lo mismo contigo.

La séptima es no dejarlo todo en el ámbito digital. El cara a cara es importante, has de ir a reuniones, a presentaciones, a conferencias. Intentar estar presente en aquellos lugares en los que se habla de cosas de las que tú hablas. E intentar quedar con las personas que consideras interesantes y mantener reuniones presenciales, no solo por email o chat.

Y por último, la octava, has de ser agradecido. Da las gracias por la inspiración, por los contenidos, por las ideas inspiradoras, por la ayuda, por su guía. Cuanto más agradezcas sinceramente a los demás por su ayuda, más probable es que quieran seguir ayudándote.

Yo añadiría alguna mas, por ejemplo, creo que es importante que tu aprendas algo personalmente en cada cosa que escribas, porque si tu aprendes, otros seguro que aprenden. Y también creo que es muy importante escribir muy a menudo, porque al final las probabilidades de que escribas cosas que a la gente le interesen son mayores cuanto más escribas.

Bueno, yo intento ser yo mismo cuando escribo, aunque supongo que eso lo ha de decir los que me conocen personalmente y leen lo que escribo. Fracaso estrepitosamente en mi actividad en las redes principales, pero estoy intentando mejorar –el tiempo, ese esquivo bien. Sobre los contenidos, pues ya lo he dicho antes, no estoy demasiado convencido con ellos últimamente. Creo que me organizo bien, pero aún y así, no llego a todo. Intento ser consistente con mi mensaje, y creo que en general lo consigo. Ayudar, lo que se dice ayudar, no lo hago demasiado, quizás porque no he encontrado la manera de hacerlo, pero he de mejorar en ese punto. El cara a cara lo llevo fatal, supongo que porque el blog no es mi trabajo principal, y francamente, no veo como mejorar en ese punto. Y el agradecimiento, siempre cito mis fuentes, pero realmente no doy las gracias, y no cuesta nada hacerlo, lo voy a intentar. Aprendo cada vez que escribo algo, pero la frecuencia no es mi fuerte.

De todas maneras, está claro que para conseguir hacer todo lo que Lewis propone se tiene que estar dedicado casi al 100% al tema, e incluso tener gente que te ayude, porque yo tardo una hora en escribir un post como este, sin tener en cuenta el tiempo de documentarse. Quizás mi problema es que le doy demasiadas vueltas a las cosas, y simplemente he de seguir escribiendo de lo que me guste, como un índice de lo que va pasando por mi cabeza o por mis manos.

Gracias a Lewis Howes, hace una recopilación muy concisa y sencilla de lo que se ha de hacer, basada en su experiencia personal, y si os pasáis por su blog veréis que es una persona muy interesante. Y gracias a Mª Ángeles, es mi editora, mi crítica más mordaz, y mi ayudante más importante.